Los especialistas en publicidad han apelado a diferentes técnicas para dar a conocer una marca, las tendencias actuales se enfocan en la búsqueda de nuevas formas de aprovechar los espacios publicitarios transmitiendo al público una identidad propia de la marca, reforzando el mensaje con el uso de los sentidos para conectar con los clientes a un nivel más emocional, provocando sentimientos positivos hacia la marca pero de forma inconsciente.

Es así que el aroma marketing ha dejado de ser un concepto desconocido, ya que cada vez se comprueban más los efectos positivos que generan los odotipos empresariales. Podemos ver ejemplos de esta estrategia cuando pasamos por una panadería y percibimos ese aroma a pan recién horneado que nos despierta el apetito y nos motiva a entrar a comprar.

El uso de los sentidos dentro del marketing con la finalidad de evocar recuerdos, generar sentimientos y emociones no es nuevo, ya que cientos de miles de empresas han utilizado la vista y el oído como principales receptores de los estímulos publicitarios, sin embargo se ha comprobado que la atención hacia estos medios ha disminuido, por lo que se apela al sentido del olfato, capaz de diferenciar 10 mil olores y recordar el 35% de los aromas a lo largo de nuestra vida. Además, el olfato es un sentido que puede modificar el sentido del humor, la percepción de la comida o de la limpieza de un hogar, incluso puede persuadir a una persona a comprar lo que huele.

Por estas razones, cada vez más empresas han optado por buscar un aroma que se asocie a su marca, siendo congruente con el público a quien se dirige para conectarse con ellos y alcanzar los objetivos.

Tratándose del punto de venta y de su relación con la publicidad exterior, el aroma marketing es de gran efectividad, ya que consigue reforzar una campaña lanzada por medios visuales; estudios han revelado que los establecimientos con aroma propio llegan a vender hasta un 33% más y que sus clientes permanecen por más tiempo dentro del establecimiento y entran con mayor predisposición a la compra.

Otras marcas han probado la aromatización de paneles y vallas publicitarias, con la fragancia del producto que se anuncie, siendo de gran efectividad especialmente en lugares cerrados como los centros comerciales, donde los visitantes van predispuestos a la compra y ponen más atención a la publicidad.