Cuando se trata de oficinas, hay muchos temas relevantes en el aumento de la productividad, la creación de un buen clima laboral, trato con el cliente, ventas, entre otros temas, y los olores son un factor minimizado, pero que puede ayudar con todo lo antes mencionado, e incluso en otros más.

A nadie le gusta entrar a un lugar donde huele mal, o en el que se utilicen fragancias tan fuertes que son molestas y lleguen a provocar dolor de cabeza, que nos vuelva irritables, poco dispuestos para hablar y con la sensación de querer irnos del lugar lo antes posible. Esto, en el caso de un negocio, es totalmente el efecto contrario de lo que queremos lograr.

Los aromas permanecen en el subconsciente de las personas, además es el sentido con mayor poder de evocación por lo que ante un “golpe de olor” en la nariz, el cliente relacionará la fragancia con una sensación, momento o concepto, de modo que se logra transmitir valores de marca.

Los ambientadores para oficinas que esparcen perfumes sutiles, placenteros y agradables, empleados y clientes se sentirán más cómodos, aumentará la productividad y su buena disposición.  Aromas como la bergamota ayudarán a tu personal a sentirse relajados en paz, trabajando en armonía, mientras que los cítricos combaten el agotamiento mental, dan energía, estimulan los sentidos y reducen el estrés. Por su parte, el limón da esa sensación de limpieza que tanto buscamos en la actualidad para crear confianza.

En estos tiempos en cada vez más empresas se busca crear espacios limpios y sanitizados para dar confianza a los clientes, por lo que los difusores de aroma tienen aún más importancia al reforzar la sensación de limpieza y desinfección en el ambiente, lo cual debe ir acompañado por acciones de prevención contra el virus del COVID-19.

Al elegir una fragancia para oficinas es importante determinar los objetivos a alcanzar con la aromatización, ya sea enfocados en la productividad, reducción del estrés, fatiga o ansiedad en los colaboradores que, a su vez, tendrá un efecto energizante en los clientes y visitantes de la oficina.

Para aromatizar una oficina es necesario contar con la asesoría de especialistas en marketing sensorial que te ayuden a crear aromas de marca, con objetivos específicos como lograr que las personas permanezcan más tiempo, se sientan cómodas, se interesen por productos en especial, se sientan relajadas, y se disperse el aroma en lugares específicos para alcanzar las metas.