Aumentar el engagement con el consumidor es uno de los objetivos principales de cualquier marca que quiera tener un buen posicionamiento y el aroma es una excelente herramienta para conseguirlo. Probablemente estés pensando que si no vendes perfumes, esencias aromáticas o flores el aroma no tiene nada que ver con tu marca. Si es así, estás desaprovechando una gran opción que te puede hacer ganar ventaja a tus competidores porque todavía es poco explotada.

Una imagen de marca completa

Si entendemos la imagen de la marca como algo total que engloba desde sus valores hasta su logo, instalaciones y trato ofrecido por su personal, nos podemos dar una idea más clara del papel que tiene el aroma en la ecuación. Conocido como odotipo empresarial, el aroma que identifica a una marca cobra cada vez más importancia en la relación establecida con el cliente y por eso no podemos pasarlo por alto.

El aroma como elemento diferenciador

El engagement se mide a partir de la interacción y fidelidad que tienen los consumidores o usuarios con tu marca y para conseguirlo es indispensable que les ofrezcas una experiencia que les resulte grata, pues sólo así querrán regresar. La calidad de los productos y servicios que ofreces es fundamental, pero no sirve tener lo mejor si no es presentado como lo mejor, por eso una buena estrategia de marketing es no sólo deseable, sino imprescindible y ante la gran competencia actual, emplear herramientas diferenciadoras es un must.

El aroma es precisamente una de estas herramientas por el poder que tiene sobre la memoria sensorial. Una persona es capaz de identificar más rápidamente un olor que una imagen y la impresión que causa es más duradera. Entonces ¿por qué no aprovechar este elemento en tu tienda y oficina? No hacerlo simplemente es dejar un elemento descuidado que podría jugar incluso en tu contra.

La experiencia de compra y el engagement

Crear una experiencia personalizada que te distinga de otras marcas sin duda contribuye a aumentar el engagement de tus clientes. Ellos notarán la atención al detalle y por el efecto que tiene el aroma a nivel inconsciente lo asociarán con los valores con los que ya te identifican.

El odotipo funciona como un logo olfativo y se puede difundir a través de ambientadores para oficinas colocados de manera estratégica. Además de mejorar la experiencia de tus clientes mejora su percepción, aumenta su tiempo de permanencia y a la vez incentiva la compra. Así tus clientes volverán y tus ganancias incrementarán. Pero no sólo esto, con un aroma elegido correctamente la productividad de los trabajadores también puede aumentar gracias a la creación de un ambiente de trabajo más agradable, lo que impacta en su estado de ánimo y por tanto en su disposición al trabajo.

¿Después de todo esto aún te quedan dudas? Claro que tantos beneficios no llegan tan fácilmente y es necesario que tomes las decisiones con la guía de expertos para conseguir un branding olfativo exitoso.