Tener un negocio propio es el sueño de miles de trabajadores que a diario acuden a un puesto de trabajo soñando con tener su empresa y dedicarse a las labores que más les interesan. Sin embargo, muchos de estos soñadores no cuentan con la liquidez para poner su propio negocio, y los créditos personales pueden ser insuficientes para conseguir la cantidad que necesitan para comenzar.

Afortunadamente, los créditos de liquidez o empresariales ayudan a los emprendedores a financiar sus proyectos productivos, ya sea a corto o largo plazo, con el fin de adquirir mercancía, remodelar locales comerciales, adquirir mobiliario, o cualquier otro objetivo que permita generar utilidades.

Beneficios de los créditos empresariales

  • Permiten contar de forma inmediata con recursos para financiar proyectos que generen utilidades.
  • Es más asequible solicitar un crédito que financiarse con inversionistas, ya que los créditos suelen tener tasas de interés más baja y un rendimiento más atractivo del dinero que se solicita.
  • Al obtener un crédito para construcción o para negocios se puede evitar el arriesgar propiedades de la empresa, como cuando se solicita un préstamo hipotecario que se debe poner en garantía un inmueble.
  • Las empresas que solicitan créditos y van pagándolos de forma puntual van haciendo historial crediticio para que puedan acceder a préstamos de mayores cantidades en caso de que se necesiten.

¿Cuándo es momento de solicitar un crédito empresarial?

Al inicio de este post mencionamos que muchas personas no cuentan con la liquidez necesaria para poner un negocio, y pueden capitalizarse con un crédito siempre y cuando tengan una forma de responder a los pagos. Por ejemplo, poner un negocio y mantener el trabajo fijo y que deja ingresos constantes.

Otro escenario es cuando la empresa o negocio ya está consolidada y se busca expandir. Por ejemplo, adquirir vehículos para entregar productos, comprar mercancía, ya que son situaciones que permitirán obtener ingresos y destinar una parte para el pago del crédito.

¿Cómo funciona el crédito empresarial?

En general, estos créditos son muy similares a los personales, pero se brindan a nombre de la empresa que los solicita y su función es capitalizar o financiar sus gastos. Al elegir la financiera para solicitar el préstamo debes analizar la tasa de interés, el monto de las mensualidades y si hay beneficios por pagos anticipados para pagar menos intereses.

Por último, te recomendamos tener claridad sobre el monto que necesitas, el uso que le darás y un plan de pagos para mantener el nivel de endeudamiento dentro de la capacidad de pago de tu empresa.